MSF reclamó más ayuda de forma urgente en junio
Este artículo se publicó en El Diario Fénix, digital activo hasta abril de 2017
Fuente: MSF |
El virus del ébola está
causando una masacre descontrolada cada vez más alarmante. La OMS ya
contabiliza 1.500 muertes en los países afectados (Liberia, Sierra Leona,
Guinea y Nigeria), no sin advertir que, desde que detonó el brote en marzo, es
seguro que el virus ha matado a muchas más personas, a las que no les llega la
atención debida por residir en zonas peor comunicadas.
Las dificultades para atender
a los enfermos son cada vez mayores, pues además de la falta de espacio y de
equipos en los centros médicos, los asistentes infectados fallecidos son ya
120, según informaba esta semana la OMS. La última víctima entre este
grupo fue el médico liberiano Abraham
Borbor, que trabajaba en el mismo hospital que el español Miguel Pajares, el
JFK de Monrovia, y fallecía el pasado lunes tras ser tratado con el suero
experimental ZMapp, que tampoco en él dio resultado. El contagio entre el
personal médico se está dando con peligrosa rapidez y faltan recursos para
prevenirlo.
Nuevos
casos en Senegal y en República Democrática del Congo
ABC informaba el pasado
día 22 de la muerte de trece personas en la República Democrática del Congo,
todas afectadas por una fiebre que les causaba vómitos y diarrea. Cinco de
ellas eran parte del personal sanitario que atendía a la primera mujer afectada.
Dos días después, Reuters recogía las declaraciones del ministro de Sanidad
congoleño, Felix Kabange Numbi, que señalaba el diagnóstico positivo de dos
casos de muerte por ébola, aunque desvinculados de la cepa surgida en Guinea y
extendida hacia Liberia y Sierra Leona, según aseguró el ministro.
El virus ha aparecido
también en Senegal, donde, según ha informado ABC, este viernes se anunciaba el
primer caso de ébola. Aunque según las fuentes médicas, estos contagios, más
aislados, no están relacionados con el brote que azota el África occidental, ya
se habla de expansión alarmante de la epidemia en el continente vecino. En
Liberia los casos se han extendido por todo el país, con cuatro millones de
habitantes es el territorio más afectado.
MSF
reclamó en junio que se pusieran todos los medios para frenar la epidemia
En junio, Médicos Sin
Fronteras (MSF) ya advertía a través de su director de Operaciones, Bart
Janssens, de que sus recursos se quedaban cortos para controlar la epidemia,
“ya no somos capaces de enviar más equipos a los nuevos lugares con casos,
hemos llegado al límite de nuestra capacidades”, alertaba el doctor reclamando
que tanto los gobiernos de los países afectados como los estados fronterizos y
la OMS, pusieran todos los medios para actuar sobre “una epidemia de esta
magnitud”. De esto hace dos meses, quizá la ayuda recibida desde entonces no
haya sido toda la posible.
No hay comentarios:
Publicar un comentario